En el episodio T2. EP5. “Sesiones sueltas vs programa“ previamente ya te había hablado sobre qué vender en tu negocio de coaching, asesoría o consultoría para que te sea más rentable y lo disfrutes más. 

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Ahora te hablaré de la diferencia entre un curso y un programa y cuál deberías elegir, más que nada, porque muchas coaches, asesoras o consultoras tienen esa duda y terminan poniéndose el pie ellas mismas, sobre todo cuando quieres lanzar tu negocio y ves una variedad de opciones o formatos en internet, te confundes y muchas veces terminas eligiendo algo que realmente no te conviene tanto como piensas en ese momento.

Si lo que quieres es generar ingresos más altos o que te permitan cubrir tus gastos.

Antes de lanzar mi negocio también tenía la duda.

¿Qué debo vender? ¿un curso, un programa o sólo ofrecer mis sesiones o X tiempo de asesoría? ¿A qué precio?

Te adelantaré que gracias al cielo (más que nada a mi coach de ese momento) no empecé por un curso, porque de las tres opciones es la que menos te recomiendo. 

Te explico porqué:

Se que suena tentador el crear un curso y generar “ingresos mientras duermes“ o mientras estás en una playa en el Caribe. ¿Se puede? sí, sí es posible generar ingresos mientras estás durmiendo o en una playa exótica, hay gente en internet que lo ha hecho, sobre todo antes cuando no había tanta competencia y lo siguen haciendo pero eso no significa que te pasará para ti también y cada vez es más difícil por tanta competencia.

No es tan mágico ni tan fácil como te lo cuentan, hay varios factores que entran en juego. 

Primero dejame definir qué es curso y qué es un programa:

Curso

Contenido grabado que usualmente vendes a un precio bajo o medio y que generalmente no tiene soporte o apoyo de tu parte, es decir el cliente lo consume a su ritmo, pero no tiene interacción contigo y si la llega a tener es por medio de un grupo de Facebook, donde a veces empleados contestan a tus preguntas, o alguna sesión grupal, pero hasta ahí.

Varía el soporte que incluye, pero a grandes rasgos se trata de lo que describí.

Generalmente es sobre un tema más técnico o concreto, por ejemplo: cómo usar las redes sociales, cómo usar instagram para tu negocio, como hacer Facebook ads, que no requiere una llamada individual contigo o si la requiere no hay acceso ya que ese formato está hecho para venderse en un rango de precio, digamos low cost, como mencionaba y no es la oferta premium de ese negocio.

Yo los he hecho, y son un buen complemento. Claro, hay algunos en mi opinión, más buenos que otros.

Programa

Un programa por otro lado, es algo más completo y más íntimo en mi opinión y que requiere más compromiso tanto de tu parte como de tu cliente, y que puedes cobrar a un precio más alto que un curso.

Ya que implica interacciones contigo, pueden ser un grupo de sesiones individuales o grupales contigo ordenadas de tal manera que ayuden a que tu cliente tenga un resultado específico ya que tiene soporte de tu parte. 

Los detalles de qué incluye o que no, dependen de ti y lo que ayudas a resolver. Si es individual o grupal, la duración, el precio exacto depende de ti, lo que busques y tu situación.

Ahora, porqué te recomiendo que empieces por un programa individual si quieres lanzar tu negocio de coaching, asesoría o consultoría.

Porque lo puedes vender desde el día 1 que lances tu negocio

A diferencia de los cursos, donde tienes que definir y grabar el contenido, además de elegir en qué plataforma o qué plugin es mejor para alojarlo, dónde lo vas a lanzar, cómo lo vas a lanzar, hay mucha más planeación detrás, con un programa sólo tienes que pensar y definir el número de sesiones que tendrá, ponerle precio, ofrecerlo y venderlo. 

Lo basas en conocimiento e información que ya tienes y no requiere aspecto técnico, incluso aunque sólo tengas clientes por internet, vamos que conectarte por Zoom con tu cliente no es nada complicado.

En mi programa “Mission to Profit“ (de la misión a los ingresos) te enseño como diseñar un programa, teniendo en consideración varios aspectos y cómo venderlo “relativamente“ más rápido que esperar sentada en internet (digo “relativamente“ porque yo no ofrezco soluciones mágicas ni rápidas sin trabajar pero sí sé por experiencia qué estrategias de marketing, por su naturaleza te ayudan a acortar el ciclo de venta).

Además hazte estas preguntas antes de crear un curso para vender en internet: ¿Ya tienes una lista de email? y/o ¿bastantes seguidores en redes sociales?. 

¿Ya tienes en cuenta que las conversiones en internet son del 1 al 3 por ciento y no toda la gente a la que le ofrezcas tu curso te comprará?. 

No creas que porque te siguen 100 (por poner un número) personas en redes o están en tu lista esas 100 te comprarán, si bien te va te comprarán máximo 3. 

Esto te lo digo para que tus expectativas sean realistas y es algo que quienes quieren venderte la idea suelen omitir.

Si que saldrás con material creado y con información valiosa, pero de ahí a que lo vendas más de una vez y te sea rentable es otra cosa. 

Otra cuestión. En la mayoría de casos necesitas publicidad para venderlo. ¿Por qué crees que ves muchísimos anuncios diarios en Instagram o Facebook y la mayoría son de cursos de coaches y varios ya tienen audiencias grandes? Si a ellos no se les venden sólo, a ti menos si estás empezando.

Este es otro detalle que tienes que tener en cuenta ¿como nueva coach, ya tienes un colchón de dinero para publicidad para promocionar un curso?). La mayoría de las emprendedoras tienen recursos limitados sobre todo cuando se empieza.

Ahora, si sabiendo todo esto, quieres optar por un curso, es tu negocio y tus decisiones, yo sólo te explico lo que conlleva para que tomes decisiones informada y seas más estratégica.

También existe esta creencia de que porque es “barato“ se venderá fácilmente con lo que no estoy de acuerdo, ya que todos, incluso cuando vamos a comprar algo “barato“ o de un precio no tan alto, vamos a ver quién lo está vendiendo, queremos saber quién está detrás de ese curso.

Revisamos su web o redes sociales. Y es donde entra en juego la marca personal o empresarial y la reputación. 

Aunque no es imposible que vendas un curso por internet aunque no tengas mucha audiencia, es verdad que primero tienes que construir algo, que le diga a la gente que sabes de lo que hablas. 

La gente quiere poner sus pesos o dólares en alguien que les genere confianza, ya sea porque lo siguen desde hace tiempo o lo acaban de conocer y tiene una marca personal trabajada. Y aquí va otro mito, que en internet todo se vende fácil y rápido, falso.

Si fuese así ¿Por qué el marketing de contenidos sigue existiendo y funcionando? porque nos ayuda a generar esa confianza que tiene que existir para que terminen comprando o invirtiendo, sobre todo si vendes intangibles como es nuestro caso.

O no has escuchado que compramos en quien confiamos. Y la confianza en internet es clave ya que no nos ven en persona.

Es más transformador

Ya que tienen acceso a ti en sesiones individuales (pueden ser grupales pero te explico más adelante) donde toda la atención está en tu cliente, donde resuelves dudas y apoyas, resulta más transformador y más significado para tu cliente.

Además, como tiene un precio más alto que un curso la gente se compromete más.

Piensa en cuando compras unos lentes en un Oxxo. Los avientas por ahí o no eres tan cuidadosa a diferencia de si te compras unos lentes de marca como Prada, Gucci, etc. 

Pues lo mismo para cuando compramos algo más caro, lo cuidamos más, nos comprometemos más, no sólo a asistir a las sesiones y hacer valer nuestra inversión, sino también a recuperar nuestra inversión, pasando a la acción y aplicando lo aprendido y eso te beneficia a ti porque tu cliente sale contento y con resultados.

Experimenta un antes y un después.

No estoy diciendo que un curso de bajo costo no sea de ayuda, no te aporte o no aprendas, pero la necesidad y la experiencia son distintas.

¿Cuándo es opción crear o vender un curso?

Es una opción o decisión inteligente cuando quieres diversificar tus ofertas o lo que vendes.

Para explicarme mejor: Uno de los pilares de negocio que te enseño en mi programa es definir y conocer a tu cliente ideal, pues bueno, yo podría crear y grabar un curso específicamente sobre ello, ofrecerlo y venderlo, sin dejar de ofrecer mi programa que es otra opción y sería la opción más premium para trabajar conmigo.

Ya habré planeado de antemano el tiempo y los recursos que conlleva, además de haber gestionado mis expectativas. Lo cual es muy distinto al escenario que anteriormente te he planteado.

Por otro lado, también puedes crear un curso o pasar de sesiones 1 a 1 a programa grupal con clases grabadas, cuando hayas notado que recibes las mismas preguntas una y otra vez.

Cada opción tiene sus beneficios, sólo hay que analizar y ser estratégica para no ponernos el pie y reducir riesgos.

Todas estas decisiones dependen de ti, de tus objetivos monetarios y de cómo quieres que sea tu negocio en determinado momento. 

No es que existan reglas o una línea del tiempo inamovible para agregar o eliminar estos formatos o formas de trabajar contigo. Tampoco cada decisión que tomes está escrita sobre piedra y puedes cambiar de opinión. Al fin es TU negocio y es a TU manera.

Espero que está información te haya dado un panorama para que tomes decisiones más informadas y el sueño de llevar tu conocimiento, misión o experiencia a los demás comience con cimientos más sólidos y con más estrategia detrás.

Si quieres saber cómo puedo enseñarte a atraer clientes, crear tu programa y venderlo con confianza, te invito a que veas aquí donde puedes consultar los detalles de mi programa.